Este jugo se disfruta lentamente, saboreando la frescura del mango, el toque ácido de la maracuyá y la sensación de autocuidado. Perfecto para una tarde tranquila, una lectura ligera o una agradable conversación en el porche.
Jugo refrescante de mango y maracuyá
Porque hay días que el cuerpo pide frescura, y el corazón también.
Sabía a verano incluso cuando el cielo estaba gris.
Me gusta la fruta fresca y la vida sencilla.
Uno de esos sorbos que nos hace cerrar los ojos y dar gracias sin decir palabra.Solo había mango, maracuyá, agua y silencio. Pero parecía una fiesta.
Ingredientes:
-
1 taza de mango maduro picado , del tipo dulce que casi se derrite
-
1/2 taza de pulpa de maracuyá fresca
-
300 ml de agua muy fría, o agua de coco.
-
Cubitos de hielo (muchos si hace calor adentro también)
-
Unas hojas de menta (para esa frescura del alma)
-
Endulzante natural o miel , solo si el mango lo pide, pero lo dudo.
Método de preparación:
-
En una licuadora, licua el mango, la pulpa de maracuyá y el agua.
-
Cuélelo si desea una textura más fina, o deje los trozos si quiere recordar que es fruta real.
-
Añade hielo y hojas de menta.
-
Sirve despacio. Porque la vida también merece una pausa.
Para servir:
Un bonito vaso. Un balcón. Un soplo de aire fresco.
O simplemente tú, tu cocina y la sensación de que cuidarte es también ofrecerte belleza.
La dosis justa de dulzura, la acidez justa. Un sorbo y todo respira.
Danielle Parada Oficial